“Cuando camines hoy, recuerda que estás vivo.”
No pretendo que este texto tenga un carácter científico, un valor de transmisión de conocimientos, ni mucho menos. Simplemente se trata de abrir este espacio para compartir el dolor de lo ocurrido anoche en Santiago y mostrar mi apoyo a todas esas familias y amigos de las víctimas del descarrilamiento.
Oímos que ante una tragedia de estas características, ante cualquier impacto similar, lo primero es expresar las emociones: dolor, rabia… Permitir que el otro se emocione a su manera, sin límites: llore, grite, se mantenga en silencio… lo importante es estar ahí. La incertidumbre duele, la espera ahonda la angustia y en ese lapsus que no sabes lo que ocurre, el tiempo se hace eterno.
Entre el humo de los vagones incendiados, los amasijos de hierro, los cristales estallados surge la solidaridad. Nos olvidamos de política, colores, protestas y emana la mejor versión de cada uno. Vecinos, sanitarios, bomberos, policías, psicólogos… actuando al unísono, sin dilación para prestar todo su apoyo.
Como comentaba una amiga esta mañana “una vez más la vida nos dice que no controlamos nada”. Simplemente se trata de ser consciente de cada segundo, de agradecer estar vivos y caminar cada paso de nuestro recorrido con exquisita belleza.
Una fecha muy señalada. Un pequeño espacio que comparto. Un paso de este camino en el que deseo acompañar a víctimas, familias, amigos y todas las personas que un día como hoy, y muchos más días, muestran su solidaridad.
COACHING E INTERNACIONALIZACIÓN 
Gracias por tu generosidad y tu cariño que se siente en cada una de tus palabras….
Patricia
Tal cual lo he sentido, Patricia. Gracias a ti por participar en este espacio.
Impresionante este dolor que nos ha tocado tan de cerca. Cierto que no podemos controlar mucho de lo que nos puede suceder pero si como enfrentarnos y ayudar en todo lo posible.
Así lo han hecho todas las personas que allí se encontraban. El ser humano es grande.
Totalmente de acuerdo contigo, Vicky.
Momentos difíciles ,muestras de grandes movimientos generosos y altruistas. La union hace la fuerza!! La vida nos muestra que no controlamos nada , nunca sabemos que va a ocurrir en el instante siguiente . Máximo cariño y respeto a las familias de víctimas y heridos .
Gracias Ainhoa !!
Gracias a ti Montse por compartir tus palabras en este espacio.
Hay personas que pasan con suerte por la vida y otras que tienen la fatalidad en un instante, como los pasajeros del tren de Santiago. Nosotros en Chile pasamos un terremoto del grado 8, y la suerte fue que se produjo en domingo de verano a las 8 de la tarde y las casas, más de mil destruidas, estaban muy vacías, por lo que solo hubo «unos 100 muertos». ¿Qué hubiera pasado de ser a las dos de la madrugada con las casas llenas? Millares. Recordarás que preparábamos las maletas para volver a España y los cuatro estábamos juntos. Otra feliz circunstancia.
Pues si papá. La verdad es que eso se llama tener suerte. Sobrevivir a momentos así te hace ver la vida con inmenso agradecimiento.